SANTA FE.- Un trabajador rural de 31 años murió y una adolescente de 12 años se encuentra internada, en un rebrote de fiebre hemorrágica argentina, conocida como "Mal de los rastrojos", causada por el virus Junín, que se desarrolla en una extensa región que abarca parte de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y La Pampa, afectando principalmente a las personas que viven o trabajan en el campo.
La directora de Epidemiología de la Municipalidad de Rosario, Analía Chumpitaz, confirmó el fallecimiento del trabajador.
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En cultivos y cosecha de granos:
Los roedores son una plaga que afecta gravemente los rindes de la producción de granos, ya sea cuando atacan los campos sembrados o cuando ingresan a los silos para ingerir los mismos, estas acciones se ven agravadas por la contaminación que provocan con sus heces y orina. Se estima que una plaga de roedores puede causar hasta un 22% de perdidas.
En sistemas productivos con animales de granja:
Los roedores son abundantes en los feedlot. En algunas zonas, más del 90% están infestadas. En las granjas, que proporcionan refugio y comida en abundancia, las infestaciones son más propensas y tienen un impacto económico muy negativo.
Los roedores son portadores de enfermedades y algunas de ellas son capaces de contaminar los alimentos de una granja, contaminar los suministros de agua y transmitir las enfermedades de animal a animal.
Aunque los excrementos son el método más común de transmisión, también se puede transmitir a través de su piel, orina, saliva y sangre.
Muchas de estas enfermedades son perjudiciales para los seres humanos y el ganado, teniendo un impacto negativo en la producción.
Los daños a edificios y equipos
Los roedores pueden causar grandes daños estructurales a edificios y equipos agrícolas.
Los dientes incisivos de los roedores tienen un ritmo de crecimiento de hasta 5 mm por semana, es por ello que tienen que roer materiales duros como madera, metales o cemento para gastarlos.